El Dr. Jhonatan Wong, hematólogo, impartió la pasada semana la sesión Clínica “Esplenomegalia: Orientación Diagnóstica”, en el marco de los Cafés Clínicos. Hablamos con él sobre esta dolencia que es importante reconocer a tiempo para investigar las causas que la provocan.
¿Qué es la esplenomegalia?
La esplenomegalia es el crecimiento anormal del bazo. El bazo es un órgano que se encuentra arriba y a la izquierda del abdomen, y, habitualmente, por debajo de las últimas costillas y que tiene varias funciones. La principal, la producción y maduración de los linfocitos para nuestras defensas. Otra de sus funciones, es el filtrado de la sangre, a través de unas células que se llaman macrófagos. Hacen función de filtro limpiando células sanguíneas deterioradas o infectadas por bacterias. Se le llama esplenomegalia cuando el bazo crece y puede palparse. Normalmente se dice que está grande cuando mide más de 12 cm, pero el hecho de encontrarlo al palpar el abdomen nos indica que hay un problema.
¿Cuáles son las causas de este crecimiento anormal del bazo?
La causa más habitual de la esplenomegalia es un problema hepático. Cualquier problema del hígado que hace que se fibrose, crezca o aumente la tensión de la sangre, causa una hinchazón en el bazo. Otras causas menos comunes son las infecciones virales, como la mononucleosis infecciosa, también pueden generar esplenomegalia en gente joven. En otras ocasiones, menos frecuentes, nos encontramos con enfermedades como el linfoma o los procesos tumorales, que pueden infiltrar el bazo.
Hay linfomas que sin afectar mucho al paciente, como pérdidas de peso o ganglios palpables, pueden tener solamente el bazo agrandado
¿Cuáles son las consecuencias de la esplenomegalia?
La más importante, la ruptura del bazo. Si crece mucho, está a riesgo de romperse. En ese caso se sangra mucho, y es un problema quirúrgico que hay que resolver de inmediato.
¿Qué especialidades deben estar más concienciadas ante esta enfermedad?
El médico de atención primaria, quien está al pie de cañón con los pacientes. El médico de cabecera sabe bien cómo enfrentarse al crecimiento del bazo, qué pruebas realizar al paciente, cuándo derivar o cuándo hacer el seguimiento, quitando así así una angustia innecesaria a los pacientes y un volumen de trabajo importante en áreas más especializadas.
¿La detección de la esplenomegalia es importante porque es un indicador de otras enfermedades que pueden pasar más desapercibidas?
Sí. Sobre todo es importante en casos de enfermedades de la sangre como anemias, linfomas o leucemias, que durante su evolución afectan al bazo. Puede ocurrir que estas enfermedades, sin afectar mucho al paciente, puedan tener solamente el bazo agrandado. Por ejemplo, la esplenomegalia puede ser el primer síntoma que nos permita detectar con tiempo un linfoma. Por eso es importante saber buscarla.